Principia oecologica. Sobre la resonancia del vivir en la actividad de pensar y en la operación tecnológica

Abstract

[spa] La presente investigación gravita en torno a la siguiente afirmación: vivir es hacerse eco. Pero, ¿cómo se hacen eco las diferentes modalidades de seres vivientes? Como mínimo, mediante la ejercitación de tres caminos operativos que se hacen eco de modo simultáneo, aunque ejercitando diferentes protagonismos. En primer lugar, como oiko/morada; es decir, ejecutando pliegues y repliegues (individuales y colectivos) que ponen en juego un movimiento centrípeto que reúne y resguarda. En segundo lugar, el eco/oiko se ejecuta como actividad propagada; a saber, los pliegues indefectiblemente se despliegan en la ejercitación de un movimiento centrífugo que expande su resonancia. En tercer lugar, la ejercitación de pliegue, despliegue y repliegue permite hacerse eco de las propias operaciones y de las operaciones que acontecen en el medio al cual se entrelazan. En este sentido, el objetivo de este trabajo será narrar y problematizar la historia de los pliegues vivientes sobre el escenario terrestre. Y esta genealogía de la vida (que, aquí, se nos revelará como la ejercitación de una “ecografía”), sostendrá que si el pensar y el vivir presentan un íntimo parentesco (como menciona Simondon), y si –como afirma Canguilhem–, en nuestra calidad de seres vivientes somos consecuencias de las propias leyes de multiplicación de lo vivo, es porque el pensar (humano) y el maquinar (tecnológico) amplifican y recrean metaestablemente un ejercicio operativo que ponen en juego hace casi cuatro mil millones de años los primeros pliegues procarióticos. Nuestra ecografía, de este modo, ejecutará tres grandes movimientos: uno dedicado a la emergencia y evolución de los pliegues de vida, otro dedicado al despliegue del pensamiento y, por último, un movimiento que se propone aprehender el repliegue de la tecnología y su significado en el devenir del universo.

[eng] This research revolves around the following statement: to live is to echo. But how do the different modes of living beings echo? Through the exercise of three operational paths that echo simultaneously, although exercising different roles. First, as oiko/abode; that is, executing folds and refolds (individual and collective) that put into play a centripetal movement that gathers and protects. Second, the echo/oiko runs as a propagated activity; namely, the folds unfailingly unfold in the exercise of a centrifugal movement that expands their resonance. Thirdly, the exercise of folding, unfolding and refolding makes it possible to echo the operations themselves and the operations that take place in the environment to which they are intertwined.

In this sense, the objective of this work will be to narrate and problematize the history of the living folds on the terrestrial scene. This genealogy of life will maintain that if thinking and living are closely related (as Simondon mentions), and if –as Canguilhem claims–, in our quality of living beings we are consequences of the laws of multiplication of the living, it is because (human) thinking and (technological) machining metastably amplify and recreate an operational exercise that the first prokaryotic folds put into play almost four billion years ago. Our genealogy of life, in this way, will execute three great movements: one dedicated to the emergence and evolution of the folds of life, another dedicated to the unfolding of thought and, finally, a movement that aims to apprehend the withdrawal of technology and its meaning in the process of the Universe.