El trabajo social en acción: Prácticas profesionales en los Servicios Sociales Básicos. Un estudio de caso de Tarragona (2011-2016 )

Abstract

Esta investigación explora cómo las trabajadoras sociales de los servicios sociales de primària tratan de proporcionar apoyo a personas usuarias que se encuentran en situaciones dramáticas de vulnerabilidad económica y social. Las profesionales despliegan una gran riqueza de conocimientos y de habilidades (que no siempre resulta evidente) para responder a situaciones urgentes y extremas. A pesar de este nivel de compromiso y de creatividad, la escasez y, a veces, la ineficacia de los recursos y servicios, así como un contexto socioeconómico difícil, provocan que muchas veces la intervención profesional tenga un carácter más paliativo que empoderador.

Esta mirada sistemática a la práctica del trabajo social evidencia que, en ocasiones, el mundo académico genera unas explicaciones y unas metodologías desconectadas de la realidad. Ciertamente, ante unas necesidades sociales complejas que se presentan con carácter de urgencia, las intervenciones realmente disponibles a menudo tienen un carácter imperfecto y a veces transgresor. En realidad, la sociedad delega sobre las trabajadoras sociales múltiples responsabilidades, que a veces resultan contradictorias y que a menudo son imposibles de alcanzar. Durante las entrevistas de investigación, las trabajadoras sociales han expresado estos límites del trabajo social con una lucidez extraordinaria, tal vez propiciada por los dilemas éticos y las tensiones emocionales derivadas de tener que intervenir a diario en situaciones humanas complicadas y desesperadas.

El estudio concluye, primero, que hay que establecer políticas de rentas garantizadas, así como incrementar la autonomía profesional frente a las dinámicas burocráticas y de presión asistencial prevalentes en los servicios sociales básicos. En segundo lugar, el objetivo manifiesto de poner el interés de la persona en el centro de la intervención debe significar también que los procesos de mejora de la calidad de los servicios sociales incluyen explícitamente las opiniones y las experiencias de las usuarias. Por último, el trabajo social no puede comprenderse únicamente como una práctica con connotaciones técnicos o relacionales, ya que la acción profesional siempre tiene un impacto en términos de opresión y de justicia social.