Walter Benjamin y la escritura disruptiva. Sobre la condición crítica de la filosofía y el arte en el tardo-capitalismo

Abstract

La elaboración crítica benjaminiana - y consecuentemente la ontologización de los restos que nos planteamos en nuestro ensayo - es generada en la dirección intencional de la conjura9 y el montaje de fragmentos que nos devuelven la mirada como entes vivos. Por lo tanto es preciso que en estos breves momentos de alumbramiento dialéctico se redistribuya el espacio justo antes de perderlo para siempre en la más absoluta oscuridad. Considerando este destello en su proyección espacial, observaremos que este alumbra desde su zenit un espacio a su alrededor y en todas direcciones, abarcando múltiples ángulos y proyectando simultáneamente una inagotable fuente lumínica multidireccional. Esta es propuesta desde sus límites formales autogenerados en un proceso que es simultáneamente propositivo y discontinuo, en tanto que interruptor de la oscuridad de la que surge en primer lugar. Imaginemos por momentos la iluminación escritural benjaminiana elaborada en el tejido temporal: esta no solo nos permite recobrar partes del pasado, sino también leer el futuro que hay en él. La forma sistemática que subyace a la articulación discursiva de Benjamin genera una tensión irreductible entre múltiples coordenadas temporales, evidenciando la diferencia entre el discurso temporal cerrado de la memoria de infancia proustiana y la múltiple espontaneidad plástica del recuerdo, del cuaderno de notas, del diario y del apunte fragmentario, que Benjamin continuaría elaborando de manera irregular pero constante hasta el oscuro final de sus días.